El suelo radiante es uno de los sistemas de calefacción más eficientes, confortables y estéticos del mercado. Su funcionamiento se basa en la distribución uniforme del calor desde el suelo, ofreciendo una temperatura agradable en toda la estancia y un importante ahorro energético frente a los sistemas tradicionales. En nuestra empresa, con más de 20 años de experiencia en el sector de la construcción, estamos especializados en la instalación de sistemas de calefacción por suelo radiante en Cantabria y el norte de España. Realizamos proyectos tanto en viviendas particulares como en locales, oficinas, naves industriales y grandes obras.
Calor uniforme en toda la vivienda, sin puntos fríos ni corrientes de aire, para un bienestar excepcional.
Reduce hasta un 30% el consumo energético comparado con los sistemas de calefacción tradicionales.
Compatible con fuentes renovables como aerotermia y geotermia para una climatización más sostenible.
Elimina radiadores visibles, ganando espacio útil y permitiendo una total libertad de decoración.
Funciona también como sistema de refresco en verano, ofreciendo confort térmico durante todo el año.
El sistema de suelo radiante se compone de tuberías instaladas bajo el pavimento por las que circula agua caliente (o fría, en el caso de sistemas reversibles). El calor se transmite de manera progresiva hacia arriba, calentando el espacio de forma homogénea. Este sistema puede instalarse junto con mortero autonivelante, que envuelve las tuberías y mejora la transmisión térmica y la nivelación del suelo, garantizando un acabado perfecto antes de colocar el pavimento final.
Suelo radiante por agua (hidráulico): el más común, ideal para viviendas y obras nuevas. Se conecta a calderas, bombas de calor o sistemas de aerotermia.
Suelo radiante eléctrico: más sencillo de instalar y recomendado en reformas o superficies pequeñas.
Suelo radiante de anhidrita: utiliza mortero autonivelante a base de anhidrita para una mejor conductividad y un acabado más fino.
1. Preparación de la base o recrecido.
2. Colocación de paneles aislantes y tuberías.
3. Pruebas de estanqueidad y funcionamiento.
4. Aplicación del mortero autonivelante (anhidrita o cemento).
5. Colocación del pavimento final una vez seco.
Trabajamos con maquinaria moderna y materiales certificados, garantizando
instalaciones seguras, limpias y adaptadas a cada tipo de obra.
Sí, tanto en obra nueva como en reformas. Solo es necesario contar con la altura
suficiente para el recrecido del sistema y el aislamiento térmico adecuado.
Casi todos: cerámica, gres, porcelánico, piedra natural, parquet, vinilo o laminado. Lo
importante es que el material permita una buena transmisión del calor.
Muy poco. En sistemas de agua se recomienda una revisión cada 3–4 años para
comprobar presiones y posibles fugas. Los sistemas eléctricos prácticamente no
requieren mantenimiento.
Sí, de hecho, el mortero autonivelante de anhidrita o cemento es el material más
recomendado para cubrir las tuberías. Aporta estabilidad, conductividad térmica y un
acabado perfectamente nivelado.
Depende de la superficie y del aislamiento, pero suele alcanzar la temperatura de
confort en 30 a 90 minutos.
Sí, en sistemas conectados a bombas de calor reversibles o aerotermia, el circuito
puede hacer circular agua fría y mantener una temperatura agradable en verano.
Sí. Aunque la inversión inicial es mayor que la de un sistema tradicional, su consumo es
mucho menor, por lo que se amortiza rápidamente con el ahorro energético.
Instalamos sistemas de suelo radiante por agua y eléctricos en Cantabria, Santander, Torrelavega, Asturias, Bizkaia y Burgos. Nuestro equipo técnico se encarga de todo el proceso: diseño, instalación, pruebas y acabado final con mortero autonivelante, garantizando eficiencia, durabilidad y el máximo confort térmico. Solicita tu presupuesto sin compromiso y descubre todas las ventajas del suelo radiante para tu vivienda o negocio.